Diego Luis Córdoba, abogado chocoano que se destacó en el Congreso de la República como un gran orador y dio una gran lucha por lograr que su región se constituyera en departamento para tener mejor acceso a los recursos y el apoyo del gobierno nacional, militó siempre en el partido liberal, pero defendía ideas de corte socialista; manejaba magistralmente la palabra y de sus discursos, quizás el más famoso lo hizo en 1936; a propósito de ese discurso Luis Eduardo Nieto Caballero redactó una columna en Semana donde lo señalaba como “el orador de más larga duración en todo el mundo”.

Teresa Martínez de Varela, maestra chocoana, poeta, madre de Jairo Varela, el gran músico, escribió una biografía de Diego Luis Córdoba en la que señala: por allá en 1936, en el primer gobierno de Alfonso López Pumarejo, se discutía el tratado Comercial de Colombia y los EE.UU. El ilustre chocoano era opositor de la negociación. Empezó a hablar durante seis horas consecutivas. Pasada la medianoche, se le aplicó el “cuarto de hora reglamentario”; o sea que Diego Luis debería hablar con intervalos de quince minutos, mientras otros intervenían. Y sumado el tiempo completó CUATRO HORAS MAS, o sea un total no menor de diez horas…”

«El tratado es un obstáculo insalvable para el progreso industrial del país», dejó como constancia en el Senado, en el marco de una serie de vehementes discursos que defendían el TLC con Estados Unidos. Diego Luis fue el único voto en contra. Eran los industriales nacionales los que más tarde pedirían protección ante el avasallamiento de los empresarios norteamericanos. Natanael Díaz, otro de los grandes líderes afrocolombianos, estaba plenamente de acuerdo con Diego Luis: “Entonces, pocos se dieron cuenta de que Córdoba tenía la razón. Solo ahora, se están dando cuenta, especialmente los industriales que piden más y más protección para lo de ellos”. (Revista Sábado, 9 de agosto de 1947)”.

Diego Luis Córdoba demostró de manera prematura un pensamiento crítico y una postura nacionalista sobre una de las discusiones que continúan vigentes hoy para el desarrollo nacional como lo es el perjuicio que representan los desventajosos TLC en nuestra economía. Es un ejemplo de la importancia que revisten los aportes de nuestros antecesores afrocolombianos, y por ello merecen mención especial en este Día de la Afrocolombianidad