Defendemos a Fecode, la autonomía sindical y la independencia de los poderes públicos y rechazamos el rompimiento de la institucionalidad

Se ha desatado un intenso debate alrededor de las investigaciones que se adelantan con respecto a la posible violación de los topes de financiación de la campaña del presidente Petro. En ese contexto, la donación que hizo Fecode de 500 millones de pesos ha provocado toda una andanada de ataques a nuestra federación, no solo por los medios de comunicación, sino también por todos los sectores históricamente enemigos del movimiento sindical.

Se destaca el papel agresivo del fiscal Francisco Barbosa, quien procede con actuaciones espectaculares y arbitrarias a allanar la sede de la federación y pretende judicializar a prestantes dirigentes como a su presidente Domingo Ayala y a Nelson Alarcón y William Velandia, expresidentes y otros dirigentes.

Respaldamos a Fecode como la organización sindical que representa al magisterio colombiano y que se ha caracterizado por su lucha aguerrida y permanente en defensa de la educación pública, los derechos de los maestros, la soberanía nacional y la democracia.

Respaldamos el legítimo derecho de los sindicatos de expresar sus respaldos a partidos y candidaturas políticas, eso sí, respetando el pluralismo y la democracia interna, aspectos en los que debemos ser ejemplares.

Ese apoyo incluye los económicos, con apego a las estipulaciones estatutarias y legales, como bien lo hacen las distintas organizaciones sociales, empresariales y gremiales en el país.

Debe quedar claro que el manejo y destinación de tales apoyos económicos es responsabilidad de las campañas y no de los sindicatos donantes, en este caso Fecode, que no pueden responder por la violación o no de los topes de campaña. Hacer recaer la culpa en ella es una manipulación de la información para afectar la prestancia de la organización.

Expresamos todo nuestro respaldo a los compañeros Domingo Ayala, Nelson Alarcón y William Velandia frente a las incriminaciones infundadas que pretende imputarles de manera arbitraria y politiquera la Fiscalía General de la Nación. Rechazamos la campaña de difamaciones y macartismo contra el sindicalismo y el magisterio colombiano.

Defender y respetar el Estado de derecho y la institucionalidad es una obligación del presidente de la República, en primer lugar, como también de la justicia, los organismos de control, el Congreso, todas las organizaciones y la ciudadanía. Los procedimientos y métodos de funcionamiento de los poderes públicos no pueden ser interferidos por ninguno de los demás poderes, organizaciones o ciudadanos. Eso es lo que siempre hemos enseñado los maestros.

Condenamos todo intento de subvertir el orden constitucional, los golpes de Estado y la alteración del orden legal, sea quien sea el o los actores que lo pretendan. Le hace un gran daño al magisterio la conminación pública de Gustavo Petro para que sean los maestros quienes encabecen las concentraciones del respaldo a su gobierno en las calles de cada pueblo o ciudad. Los maestros son autónomos en sus definiciones políticas y gremiales.

Insistimos en que Fecode está en la obligación, y debe hacerlo incluso con la movilización, de exigirle al gobierno nacional que resuelva los problemas más apremiantes del magisterio: La reforma al Sistema General de Participaciones, SGP, la negociación del estatuto docente único, el respeto al régimen especial contenido en la Ley 91 de 1989 en materia de salud y prestaciones sociales y el cumplimiento de los acuerdos firmados en la última negociación, entre ellos, el pago inmediato de las deudas. Sobre estas reivindicaciones y por el respeto a nuestra FECODE, estaremos siempre en la disposición de movilizarnos.

FRENTE DE TRABAJADORES TRIBUNA SINDICAL

Victoria Avendaño
Comité Ejecutivo Nacional FECODE
Jhonson Torres
Comité Ejecutivo Nacional CUT
Timoteo Romero
Comité Ejecutivo Nacional CUT Diógenes Orjuela Expresidente CUT